• LOS REQUISITOS DE LA EVOLUCION   
• Experiencia: Es el requisito más importante de todos. Sin experiencia no es posible evolucionar. La experiencia puede ganarse de 2 maneras, la fácil y la difícil. La fácil consiste en entrenamientos, y aunque el Digimon no corre peligro -al menos no uno muy grande, se entiende-, la experiencia que se gana es muy poca. La difícil es la batalla. Si el Digimon gana la pelea, la experiencia que gana es mucho mayor y también puede aprender nuevas habilidades; pero si llega a perder, no solo no adquiere nada, sino que corre el riesgo de morir. La experiencia también se puede adquirir cuando un Digimon absorbe la información de un digimon al que ha matado (como en el caso de Beelzemon, quien obtuvo el Golpe del Rey Bestia de Leomon luego de absorber su información.

• Generación: Podría decirse que este es otro de los factores determinantes a la hora de la evolución. La teoría de la Generación consiste, en otras palabras, de cuántas vidas ha “vivido” un Digimon. Cuando un Digimon nace por primera vez en el Mundo Digital, se dice que es de “Primera Generación”. Salvo raras y contadas excepciones, un Digimon de primera generación tiende a evolucionar a sus formas más débiles y simples. Lo más probable es que muera en batalla, y si tiene la suerte de sobrevivir, morirá a los pocos años de vida. Cuando un Digimon muere en el campo de batalla, no retiene mucha de la experiencia que ganó en vida. Sin embargo si muere de forma natural, lo que aprendió se queda con él. Cuando renace, el nuevo Digimon de Segunda Generación es más fuerte, y tiende a evolucionar a un Digimon mejor. Un Digimon puede llegar a tener muchas generaciones antes de morir para siempre.

• Win Ratio: El tercer factor en la evolución, el Win Ratio (Porcentaje de Victorias) marca la diferencia entre un monstruo débil y uno fuerte. Este es el factor más fácil de determinar, ya que consiste en un cálculo de cuantas victorias y derrotas ha tenido el Digimon en cuestión. Entre más batallas haya ganado un Digimon, mas fuerte evolucionara: Por ejemplo, un Greymon con un Win Ratio del 80% es más poderoso que un Greymon cuyo Win Ratio sea del 20%. Existen ciertos Digimon que exigen cierto Win Ratio para poder evolucionar en ellos, aunque esto sea casi exclusivo de los videojuegos y los juegos de cartas. La cantidad del Win Ratio exigido depende de la especie del Digimon que va a evolucionar.

• Fusión: Este requisito es solo opcional, ya que muy pocos Digimon exigen una fusión para evolucionar a ellos. .

• Factores Varios: Esta es una combinación de pequeños factores que pueden llegar a influenciar a un Digimon a la hora de evolucionar:

• • Lugar: Según la familia a la que pertenezca el Digimon, éste puede ser influenciado a la hora de evolucionar dependiendo del sitio en donde se encuentre. Ej.: Un Patamon que se encuentre en un bosque tiene el 50% de posibilidades de evolucionar a Centarumon, mientras que uno que este en un lugar sagrado puede tener las mismas posibilidades de hacerlo en un Angemon.

• • Hora: Otro factor opcional es la hora, ya depende también de la familia a la que pertenezca el Digimon en cuestión. Ej.: Un Agumon tiene el 50% de posibilidades de evolucionar a Greymon cuando es de día, pero cuando es de noche tiende a evolucionar a Tyrannomon.

• • Estado de Ánimo: Este es un factor más importante entre los opcionales, ya que puede llegar a influenciar seriamente la evolución de un Digimon en ciertos casos. Mientras un Digimon este feliz y tranquilo, tiende a evolucionar de la mejor forma, mientras que un Digimon triste o bajo presión, evoluciona precipitadamente y a veces, no en la forma deseada. El ejemplo más conocido es SkullGreymon.

• • Disciplina: Otro factor menor, pero no por eso deja de ser importante. Un Digimon disciplinado tiende a evolucionar a un Digimon tipo Data Vacuna, mientras que uno indisciplinado tiene más posibilidades de evolucionar a un Virus. Un ejemplo lo hallaríamos en el videojuego Digimon World, en que el Digimon del entrenador puede tomar distintas líneas evolutivas según la disciplina que haya adquirido (entre otros factores).

• • Edad: La edad es un factor más o menos importante, pero es uno de los menos tomados en cuenta, a menos que tengas un Pendulum. Un Digimon de primera generación llega vivir entre los 15 o 20 años. Uno de tercera generación o más, tiende a vivir más allá de los 30. Sin embargo entre más viejo sea un Digimon, menos posibilidades tiene de evolucionar, y si llega a hacerlo, esta evolución será muy débil. Ejemplos oficiales serían: Babamon, que se trata de una Rosemon que ha envejecido cuando el hechizo de su joya Tiferet queda maldito, y Mervamon, anteriormente una Minervamon que acumuló experiencia y logros.

• • Estadísticas: Este factor es determinante a la hora de decidir en qué quieres que evolucione un Digimon. Las estadísticas son el HP, MP, la ofensiva, defensiva, velocidad, inteligencia, etc. Ciertos Digimon exigen ciertos requisitos específicos para evolucionar. Si un tamer los conoce, puede manipular las estadísticas de sus Digimon para hacer que este evolucione a la criatura deseada. Por ejemplo, un Agumon Hakase se trata de un Agumon con una inteligencia superior que se ha doctorado en estudios sobre Monstruos Digitales.

• • Defunción: Si los datos de un Digimon no son eliminados completamente cuando éste muere, lo más probable es que renazca en una nueva forma con un poder superior a su forma antecesora. Ej: SkullMammothmon fue un Mammothmon que murió por un virus; Puppetmon está construido según su perfil del cuerpo de un Cherrymon maldito, lo que conlleva la destrucción del cuerpo de este último.

• • Factores Exteriores: Estos son, como indica su nombre, elementos externos a un Digimon que lo influencian a la hora de evolucionar, por ejemplo, la energía sagrada -de un Digivice o un Emblema-, un Digiegg o un Espíritu Digital, un programa especial, su ambiente natural, etc... Por ejemplo, un MoriShellmon es un Shellmon que se ha adaptado a la vida en el bosque. Otro ejemplo lo tendríamos en DarkTyrannomon, un Tyrannomon que se ha visto afectado por la acción de un virus informático.